Archivo diario: enero 5, 2011

El tobillo del Burrito

Es un milagro que de vez en cuando podamos seguir disfrutando unos minutos del juego de Ortega. Un exjugador en el fútbol de primer nivel.
Hace sólo medio mes, El Burrito era detenido en Jujuy y en ebriedad, sus dos estados naturales. En los últimos partidos ya no ha sido convocado lo cual sumado al interés mostrado en River por D´Alessandro parece indicar el fin definitivo de su carrera.

Ariel"Burrito"Ortega

Si tuviese que destacar a dos  jugadores que por mi edad y su estilo de juego más me emocionaron, esos fueron Romario y Ortega. Cuando jugaba con mis amigos  imitaba al Burrito, y siempre escuchaba eso de «¡se regatea a sí mismo!». Sólo Butragueño era capaz de paralizar al defensor sin tocar el balón.
Allá por el año 97, Valdano confeccionó en el Valencia un equipo hecho para el espectáculo: los propios Romario y Ortega, Saib, Marcelinho Carioca,… un equipo que duró tres escasos partidos y que chocó con la destitución de Valdano y la llegada de Ranieri. Pero Ortega escogió bien y se marchó a la Sampdoria. A pesar de la dureza del fútbol italiano, muchos argentinos talentosos han triunfado allí aunque de lejos se veía que no iba a ser el caso del Burrito. Su especial manera de ver el fútbol no es compatible con llevar una carrera regular de cierto éxito, y aunque sus dos campañas en el calcio pasaron sin pena ni gloria, yo le recuerdo auténticos golazos tanto en la Samp como en el Parma.
Quizás su mejor momento correspondió al Mundial de Francia´98. Una espléndida primera fase y un magnífico partido contra Jamaica marcando dos goles parecían presagiar un histórico torneo, hasta que en los cuartos de final ante Holanda, Ortega fue fiel a sí mismo autoexpulsándose tras propinar un cabezo a Van der Sar.
Aunque toda su carrera huele a fracaso, si hiciesemos una recopilación de sus jugadas en partidos jugados sólamente con Newell´s, Fenerbahçe o la última etapa de River, nos daríamos cuenta de que este tipo de futbolistas no abundan en el fútbol de hoy. Siempre recordaré a Ortega como el mejor regateador que he conocido, pero no debemos olvidar que ha sido el jugador que ha ejecutado las vaselinas más increibles que se han visto en un terreno de juego.
Larga vida al Burrito. El mejor tobillo de la historia del fútbol.